Pantone presentó el color del año 2024: PANTONE 13-1023 Peach Fuzz. “Sutilmente sensual, PANTONE Peach Fuzz es un tono melocotón que transmite una sensación de bondad y ternura. Un tono que comunica un mensaje de atención, de compartir, de comunidad y colaboración”, expresó Laurie Pressman, vicepresidenta del Pantone Color Institute.
Como todos los años, Pantone presentó el color del año 2024: PANTONE 13-1023 Peach Fuzz. “Un tono cálido y acogedor que resalta nuestro deseo de estar juntos con los demás o de disfrutar de un momento de quietud y la sensación de santuario que esto crea, PANTONE 13-1023 Peach Fuzz presenta un enfoque fresco hacia una nueva suavidad. Un atractivo tono melocotón suavemente ubicado entre el rosa y el naranja, PANTONE 13-1023 Peach Fuzz inspira pertenencia, recalibración y una oportunidad para nutrirnos, evocar un aire de calma, ofreciéndonos un espacio para ser, sentir, sanar y desde el cual florecer”, expresó el comunicado sobre el PANTONE 13-1023 Peach Fuzz.
Sensible pero dulce y aireado, PANTONE 13-1023 Peach Fuzz evoca una nueva modernidad. Si bien se centra en la experiencia humana de enriquecer y nutrir la mente, el cuerpo y el alma, también es un melocotón discretamente sofisticado y contemporáneo cuya suave ligereza es discreta pero impactante y aporta belleza al mundo digital. Poético y romántico, un tono melocotón limpio con un aire vintage, PANTONE 13-1023 Peach Fuzz refleja el pasado pero ha sido repensado en un modo contemporáneo.
“En un momento de agitación en muchos aspectos de nuestras vidas, nuestra necesidad de cariño, empatía y compasión se hace cada vez más fuerte, al igual que nuestra imaginación de un futuro más pacífico. Se nos recuerda que una parte vital de vivir una vida plena es tener buena salud, resistencia y fuerza para disfrutarla. Que en un mundo que a menudo enfatiza la productividad y los logros externos, es fundamental que reconozcamos la importancia de fomentar nuestro yo interior y encontrar momentos de respiro, creatividad y conexión humana en medio del ajetreo y el bullicio de la vida moderna. Al replantear cómo queremos vivir, nos expresamos con mayor intencionalidad y consideración. Al recalibrar nuestras prioridades para alinearlas con nuestros valores internos, nos centramos en la salud y el bienestar, tanto mental como físico, y apreciamos lo que es especial: la calidez y la comodidad de pasar tiempo con amigos y familiares, o simplemente tomarnos un momento para nosotros mismos. Con eso en mente, quisimos recurrir a un color que pudiera centrarse en la importancia de la comunidad y la unión con los demás. Tenía que ser un color cuyo abrazo cálido y acogedor transmitiera un mensaje de compasión y empatía. Uno que fuera enriquecedor y cuya acogedora sensibilidad uniera a las personas y provocara una sensación de tacto. Un tono cuya suave ligereza y presencia aireada nos eleven hacia un futuro mejor”.
Fuente: Pantone